Pesca en Paso de la Patria

El sábado 22 de noviembre bien temprano pasé a buscar a mis amigos, Christian Pérez y Claudio Cavallaro con quienes habíamos programado saldar una deuda que teníamos que era conocer Paso de La Patria.

Luego de recorrer los 1035 Km que separan a Berisso de esa hermosa localidad del norte correntino yendo por la ruta 12 para pasar por la querida Esquina a saludar y a comer con amigos, arribamos alrededor de las 17.00 encontrándonos para los que no la conocen, con una ciudad que parece una localidad de la costa atlántica por su fisonomía de casas bajas con predominancia de calles de arena y alguna calle asfaltada en el centro; un hermosa costanera dividida en 4 playas y enfrente un banco de arena de casi un kilómetro de extensión que se transforma en una playa mas para los que practican cualquier tipo de deporte náutico.

Lo primero para nosotros era encontrar el lugar elegido para alojarnos y develar que tan acertada había sido nuestra elección realizada luego de consultar vía Internet y por teléfono distintas opciones. Al llegar a RIO PARANÁ LODGE, encontramos un lugar con instalaciones nuevas y realmente muy bien preparado tal como lo detalla su página de Internet, un lugar acogedor donde uno se siente a gusto en todo momento, con la cálida atención y dedicación de su dueño Leonardo (un tipo al que uno invitaría a ir a pescar), el cocinero Osvaldo (muy bueno todo lo que preparó, en cantidad y calidad) y la colaboración de Pedro que es un emblema de Paso de la Patria.

Sentimos desde el primer momento que la elección había sido acertada. Una pasada por la pileta, luego la picada y al rato a cenar y a preparar los equipos para pescar desde temprano al otro día.

A diferencia de otros lugares la jornada en Paso de la Patria generalmente se da en dos turnos de 4 horas; a la mañana se empieza en esta época del año a las 7.00 o 7.30 y a la tarde a 15.30 o 16.00. Esto se debe a las alturas elevadas de mediodía y a la posibilidad que brinda tener los pesqueros a minutos del embarcadero.

El domingo 23 había mucho tránsito de embarcaciones de pesca y de todo tipo en el Río y el pique se presentó muy escaso, de hecho a la mañana solo tuvimos dos capturas atípicas que fueron a la postre lo único que obtuve en el viaje, una boga y luego un sábalo clavados de mi anzuelo para dorado encarnado con dos morenas...parecía una burla del destino?La pesca se realiza en esta época del año gareteando ( la embarcación se deja a la deriva de la corriente del río) por distintos veriles y piedras, es importantísimo el guía ya que debe conocer su ubicación y como atravesarlos.

En nuestro caso Juan Infran recorrió largas distancias buscando dar con el pique pero todo su esfuerzo fue infructuoso. A la tarde el panorama era similar, el movimiento en el agua seguía siendo demasiado ya que se encuentra vedada la zona de pesca hacía el norte de Paso de la Patria, en todas las aguas que comparten con Paraguay.

Pero en uno de los intentos del guía por encontrar el pique y cuando casi se agotaba el tiempo un reel acusó una llevada (se pesca con el reel destrabado, la chicharra colocada y el dedo frenando la salida del nylon, pero permitiendo que el pez se lleve la carnada) y Claudio rápidamente trabó el reel y clavó (realizar un movimiento rápido hacía atrás con la caña llegando hasta el hombro, como un golpe, manteniendo siempre la tensión de la línea) para comenzar una muy linda lucha que terminó coronando con un Dorado que peso 9,300 Kg, fotografías de rigor y pez al agua.

Un espectacular asado nos aguardaba al llegar a la cabaña, charla con un grupo de pescadores salteños, Leo, Pedro y Osvaldo matizaron la noche. El lunes bien temprano partimos nuevamente hacía los pesqueros, Leo había conseguido Mamachas (morenas mas grandes) que aumentan la posibilidad de piques. Con un río mucho más calmo en cuanto al tránsito, nuevamente Claudio acusó un pique y capturó otro lindo Dorado que marcó 9.850 Kg, nuevamente las fotos y otra vez el pez al agua.

A la siguiente pasada, nuevamente la caña de Claudio acusó un pique y mientras traíamos las líneas para dejarle lugar, siento que mi caña se traba, supuse equívocamente que era un enganche en una piedra pero al retirar la carnada del agua se vio la mordida clara de un Dorado al que literalmente "le saque la carnada de la boca". De yapa el que traía Claudio le cortó el nylon. Un pique más errado por Claudio, un par por Christian y otro por mi, nos demostraron que con el río más calmo y con mamachas el pique estaba.

A la tarde empezamos como siempre, Claudio tuve a los dos minutos de tirar una llevada y sacó un hermoso ejemplar macho que peso 10.750kg. Seguimos barateando y nos dimos cuenta que habíamos tenido un problema con la carnada lo que iba a dificultar quedarnos en el lugar, nos quedaba la última pasada y tendríamos que volver a buscar otra carnada, fue en ese momento que la caña de Christian se clavó en el agua, todos supusimos que era un enganche, el guía dio vuelta la lancha para ir a rescatar la línea pero cuando vio cabecear la línea le digo "tenes un pescado"? comenzó una lucha espectacular con salto fuera del agua incluido, lo que es raro en peces de este tamaño; luego de varios minutos pudo sacar una hembra que marcó 15.450Kg. Como notaran en la foto estaba llena de huevos, por lo que rápidamente la fotografiamos y la devolvimos al agua.

En cuanto al regreso lo hicimos por la 14, se viaja muy bien por la nueva autovía, lástima que algunos intendentes no tengan mejores ideas recaudatorias que esconder radares en zonas de velocidad plena (respete siempre los 120KM de máxima) y poner carteles capciosos, para sacar plata.

En resumen una experiencia muy linda, quiero recomendar plenamente a Rio Paraná Lodge como lugar para alojarse y pasarla bien, se encargan de todo lo que uno necesita y algo más, y tanto Leo como Osvaldo y Pedro son personas que da gusto conocer.

Hay que aclarar que la pesca es distinta a otros pesqueros ya que los piques son menos en cantidad pero son todos portes importantes, es importante dar con un buen guía y aquí también debo recomendar a Juan Infran.

En definitiva, uno pega la vuelta y ya planifica un nuevo viaje; y eso que no pesqué...