Municiones

El Calibre .38 SPL

Algunos datos sobre el calibre .38 Smith & Wesson Special

Autor: Vanzetti Oscar Enrique

Fecha publicación: 28/10/2014

Pareciera que sobre este muy conocido, antiguo y apreciado calibre es poco lo que hoy se puede agregar ya que se han escrito numerosos artículos sobre él, "ríos de tinta" que le dicen. Pero ojeando algunas publicaciones de variado origen encontré ciertos datos que, creo, pueden aportar alguna información que quizás resulte interesante al lector.

Referido a la fecha de aparición del este cartucho he hallado, en publicaciones que se pueden considerar "serias", varias fechas discordantes y que mencionaré a continuación, lo que crea cierta incertidumbre al respecto.

Para algunos autores el .38 Spl fue puesto en circulación en el año 1898 como una mejora del cartucho .38 Long Colt de lubricación externa (outside lubrication), pudiéndose utilizar ambos en el revólver Smith&Wesson .38 Hand Ejector 1899 First Model (primer modelo). Hand Ejector significa en inglés "eyección a mano", por extraerse las vainas servidas por la presión de la mano sobre la barra extractora.

Para otros, este famoso calibre .38 Spl fue desarrollado por la casa Smith &Wesson en 1902, especialmente por impulso de Daniel B. Wesson y de su hijo Joseph, como un nuevo cartucho para el también, valga la redundancia, nuevo modelo de revólver de armazón fijo, doble acción, tambor oscilante y expulsión manual de las vainas, y que fuera designado por dicha empresa como .38 S&W Military&Police Model of 1902 Second Model (segundo modelo), siendo el primer modelo de la casa Smith & Wesson con armazón K recamarado especialmente para el nuevo cartucho en cuestión.

El nuevo calibre .38 S&W Spl es, finalmente, una versión mejorada del viejo cartucho .38 Long Colt con surcos para lubricación en la superficie externa de la bala (outside lubrication), siendo éste último (según Cartridges of the World 1997) realmente introducido en 1875 como calibre para algunos revólveres como el Colt New Line, New Police y New House.

Pero según otra versión aparentemente más congruente, el .38 Long Colt antes mencionado fue introducido, como dijera, en 1875 (para otros en 1874) para ser usado en el revólver Single Action Army, y dos años más tarde en el primer modelo de revólver doble acción (con tambor fijo) producido por la Colt?s Patent Fire Armas: el revólver Colt modelo 1877 que se presentó en tres calibres, recibiendo cada uno de ellos una designación no oficial, ya que la misma no les fue dada por la casa Colt. Ellos fueron conocidos como el modelo "Thunderer" (tronador) en calibre .41, el "Rainmaker" en .32 Colt y el modelo "Lightning" (relámpago) que fue el único revólver de este modelo que estaba recamarado para el mencionado calibre .38 Long Colt de lubricación externa. Este modelo 1877 desafortunadamente tuvo mala fama, por ser su mecanismo de doble acción proclive a romperse con bastante facilidad.

Se dice que el famoso forajido Billy the Kid usaba un Colt Lightning, arma que era una verdadera novedad entre la gente común de esa época donde él residía.

Cuenta la historia qué aproximadamente en el año 1889 aparece en USA otro cartucho de fuego central similar al anteriormente citado .38 LC, pero ahora denominado calibre .38 Long Colt de lubricación interna (inside lubrication), el cual era fabricado por la compañía Colt y que fuera declarado en 1892 de uso reglamentario en las FF.AA. americanas juntamente con el revólver Colt New Army New Style modelo 1892, de acción doble y tambor basculante. Este nuevo revólver también fue conocido como Colt New Army & Navy, ya que se convirtió en el arma de puño utilizada tanto en el Ejército como en la Marina de ese país.

El ahora mejorado y nuevo cartucho .38 LC, (que por ser reglamentario del US Army también se lo designaba como .38 United States Service Cartridge) llevaba una carga de pólvora negra de 18 grains (1,16 g) y alcanzaba una velocidad aproximada de 750 pies por segundos o pps (228,6 m/s) qué, dicen, podía ser disparado en un revólver apto para el calibre .38 S&W Spl pero no al revés, y estuvo en servicio en las FF.AA. de USA entre 1892 y 1911. Al ser posteriormente considerado inadecuado para uso militar por su pobre capacidad de detención es reemplazado, finalmente, por el cartucho calibre .45 ACP en 1911.

Pero dado qué tanto en las FF.AA. como entre los integrantes de la fuerzas policiales de EE.UU. se deseaba un cartucho de revólver más moderno y con mayor poder incapacitante que el .38 LC de lubricación interna, Daniel B. Wesson decide introducir algunas mejoras a ese considerado anticuado cartucho. Es así que se alarga la vaina del .38 LC 1889, se aumenta el peso de la bala de 150 a 158 grains, se acrecienta la carga de pólvora negra de 18 a 21½ grains (que poco tiempo después, antes del año, es reemplazada por una carga de pólvora sin humo) y en 1902 es presentado en el mercado como un nuevo cartucho designado .38 S&W Spl, juntamente con un nuevo modelo de revólver: el Smith Wesson Military and Police of 1902 Second Model (o segundo modelo), también conocido como Hand Ejector Model of 1902, después de que se le realizaran algunas modificaciones estéticas y mecánicas al revólver S&W Hand Ejector modelo 1899.

Según la casa S&W un proyectil del nuevo cartucho .38 S&W Spl penetraba en madera de pino 2 pulgadas más que uno del menospreciado .38 LC.

FIGURA N°1: S&W .38 Spl M&P modelo 1899, salido de fábrica en el año 1900. Obsérvese la terminación redondeada de la empuñadura y el extremo libre de la barra extractora.

Este nuevo cartucho, como dijera, fue denominado .38 Smith &Wesson Special (o especial) que usualmente se abrevia .38 Spl ó .38 Spc, y de acuerdo a la nomenclatura en milímetros también se lo puede identificar como 9×29,5 mm R ó 9,1x29mm R (R de rimmed = reborde, por tener una vaina con esa característica). Si hablamos en fracciones de pulgadas a este calibre le corresponde un calibre real entre .357 y .358 milésimas de pulgadas, o sea 9,0678 mm. En un comienzo, como mencionara anteriormente, fue un cartucho cargado con 21,5 grains de pólvora negra (1,39 g), una bala de plomo (lead o L) de punta redondeada (round nose o RN) con un peso de 158 grains (10,23 g), y una velocidad estándar de aproximadamente 800 pps (243,84 m/s).

El .38 S&W Spl fue introducido en un periodo de transición entre el uso de la pólvora negra (blackpowders) y de la (mal) llamada pólvora sin humo (smokeless). Pero casi inmediatamente las fábricas de municiones, a finales de 1900, utilizaron el último tipo de propelente ya que rápidamente este calibre se convirtió en muy popular, tanto entre el personal policial como en el medio civil, siendo también usado por algunas unidades de las FF.AA. de USA.

La velocidad de los proyectiles que ambos tipos de pólvoras conferían a los cartuchos "factory" (de fábrica) de la época en el calibre .38 Special, con una punta de plomo (LRN) con 158 grains de peso y utilizando un revólver S&W M&P con un cañón de longitud estándar de 4 pulgadas (10,16 cm), estaba alrededor de los 750 a 800 pies por segundos (aproximadamente 228,6 a 244 m/s). Pero el .38 Spl superaba al .38 LC en precisión y versatilidad.

Es obvio decir qué el rango de velocidades del proyectil a nivel de la boca de fuego del arma dependerá principalmente del tipo de pólvora utilizada, del peso de la punta y de la longitud del cañón del arma utilizada, entre otras variables.

Este cartucho .38 Spl de la casa S&W se convirtió rápidamente, entre los años 1950 y 1980, en el calibre más común usado en los revólveres de las fuerzas policiales de EE.UU, como también lo fue en otros países de Europa y de América del Sur, incluido nuestro país.

FIGURA N° 2: Diferencias dimensionales entre el .38 LC y el .38 SPL.

Con el transcurrir de los años y dado el notable incremento de su popularidad, las fábricas de municiones le impusieron diversas variaciones o características al nuevo cartucho tratando de modificar favorablemente sus propiedades balísticas. Así podemos mencionar a la casa Colt, que en1909 introduce el cartucho denominado .38 Colt Special, cuya única diferencia con el .38 S&W Spl residía en que la bala de plomo del cartucho de Colt tenía la punta achatada (flat nose). Había incluso un .38 Special Supe Police que utilizaba una bala de 200 grains, contundente y pesada, que alcanzaba una velocidad promedio en la boca de 650 pps.

Pero los fabricantes de municiones también desarrollaron, para esa época, otros ejemplares de cartuchos .38 Spl cuyos proyectiles alcanzaban altas velocidades y si bien algunos de ellos conservaban una punta de plomo de 158 grains, podían desplegar una velocidad de aproximadamente 1.200 pps (365,76 m/s) y, consiguientemente, producían mayores presiones en las recámaras del arma. Por ello era recomendable disparar estas municiones en algunos modelos de revólveres como los llamados .38/44, donde la cifra 44 significaba que el revólver poseía una armadura, o marco, con la fortaleza suficiente para soportar las elevadas presiones mencionadas, si bien las dimensiones del cartucho y de la bala eran similares a los .38 S&W Special de características estándar.

De estos tipos de armas con estructuras más resistentes, que estaban destinados principalmente para uso policial y que permitían soportar mayores presiones en sus recámaras por disparar proyectiles de alta velocidad, podemos mencionar revólveres como los Smith&Wesson .38/44 Heavy Duty, aparecido entre 1929/1930, y el Smith & Wesson .38/44 Outdoorsman, presentado en 1931, que tenían un armazón tipo N de mayores dimensiones como el del revólver S&W .44 Hand Ejector Third Model (tercer modelo). La casa Colt, en 1931, compite ofreciendo para estos menesteres el revólver Colt Official Police.

Para satisfacer requerimientos de las fuerzas policiales de USA y con el objeto de poder atravesar chalecos antibalas y carrocerías de automóviles, la casa S&W presenta en 1931 el cartucho .38 Special Hi-Speed. Otras armas de puño como el Colt Single Action Army también hacían posible el uso de esta munición específica, sin inconvenientes para el arma y el tirador.

FIGURA N° 3: Vista de cartuchos .38 LC, .38 SPL Y .357 Magnum.

En los revólveres S&W .38/44 los cartuchos tenían balas con tres diferentes pesos: de 158 (10,2 g), de 110 (9,7 g) y de 150 grains (7,1 g). Estas puntas podían ser de plomo desnudo o bien estar recubiertas por una envoltura metálica de gran dureza. En la actualidad se utilizan, además de municiones de características estándar, cartuchos totalmente encamisados con punta hueca (FJHP) y semiencamisados de punta blanda (SJSP) que aparecieron en la década de los 60.

Actualmente las puntas en este calibre se ofrecen con una amplia variedad de pesos y características constructivas. Se pueden encontrar puntas con un peso variable entre 95 a 200 grains, pero las más recomendables se hallan entre los 148 y 158 grains (9,59 a 10,23 gramos). También se fabrican otros con cargas más poderosas denominados +P o +P+.

Los cartuchos .38 SPL +P o +P+ qué originan proyectiles que desarrollan altas velocidades y mayor presiones en las recámaras, obligan a ser disparados en revólveres adecuados para soportarlas y así no producir en ellos, si se utilizan dichas cargas con frecuencia , alteraciones estructurales de cierta importancia.

En el siguiente gráfico pueden observarse algunas diferencias entre las performances de los cartuchos .38 Long Colt, .38 S&W Special con algunas variantes de mayor potencia, y el .357 Magnum.

GRÁFICO N° 1 .38 Comparisons - (Fuente: http://en.wikipedia.org/wiki/.38_Special)

Si tomamos en consideración las normas de seguridad SAAMI de USA, un cartucho .38 +P produce un incremento de presión entre un 9 a 10% con respecto a uno de presión estándar, y un .38 +P+ la incrementaría en un 29% también comparado con uno de presión estándar, pero sólo un 15% comparado con un cartucho .38 Spl +P.

Como se puede ver en el gráfico N° 1, un cartucho .38 Spl + P de 20.000 PSI de presión, ofrece a nivel de la boca de fuego un aumento de energía de aproximadamente un 20% mayor que una carga con presión estándar. Esto ubicaría al +P, según algunos autores, en una posición intermedia entre un .380 ACP y el 9mm Parabellum.

En cuanto a la influencia de estas mayores presiones sobre el factor velocidad expondré, a modo de ejemplo, lo siguiente:

  • a) Un proyectil normal .38 Special Winchester JHP de 147 grains, disparado desde un revólver S&W M19 con cañón de 4 pulgadas, logra una velocidad de 858 pps (261,5 m/s), y un proyectil .38 Special Winchester JHP +P+ de 147 grains desarrolla una velocidad de 911 pps (277,6 m/s). O sea que en este caso el proyectil +P+ despliega una velocidad 8,5 % mayor que uno estándar.
  • b) Si tomamos dos cartuchos marca Hornady FTX con puntas de 110 grains de peso cada uno, el proyectil .38 Spl estándar desarrolla una velocidad de 1.010 pps (307,8 m/s) y uno .38 +P alcanza los 1.090 pps (332,2 m/s), o sea una velocidad sólo un 10 % mayor. En ningún caso se menciona, en estos ejemplos, el tipo de pólvora utilizada.

Con respecto al uso para defensa personal, este calibre hoy está devaluado por algunos autores, pero si bien en un cartucho corriente con una punta 158 grains el resultado es un misil de relativa baja velocidad, tiene una densidad seccional (relación entre peso y calibre) que le permitiría alcanzar una penetración en tejidos humanos que puede exceder las 12 pulgadas (30,48 cm), la cual, en general, está aceptada como apta para producir heridas de variada severidad en órganos o vísceras profundas.

En la mayoría de los casos los proyectiles .38 Spl corrientes de plomo y los llamados de "expansión controlada", no producirían sobrepenetración en seres humanos.

FIGURA N° 4: Perfil de una herida en gelatina balística al 10%. (Fuente: http://www.frfrogspad.com/terminal.htm)

En la figura N° 4 se observa el perfil de una herida producida con un proyectil de plomo calibre .38 Spl. + P, de 158 grains, semi-wadcutter punta hueca (SWHP), que desarrolla una velocidad de 880 pps (268,22 m/s). Se pueden apreciar las características de las llamadas cavidades temporales y permanentes y que el proyectil expandido, con un incremento de su diámetro frontal a 15 mm (aproximadamente un 66%), alcanza una buena profundidad de penetración de 32 cm (12,6"), sin fragmentación ni desvío de su trayectoria. El medio de prueba utilizado es la gelatina balística al 10% tipo Kind &Knox 250, preparada con agua calentada a no más de 40°C y luego estabilizada a 4°C. Este tipo de proyectil expansivo, dice el artículo, goza de buena reputación en la calle (o sea, en tiroteos reales).

Personalmente, creo que los resultados de este tipo de pruebas en medios artificiales no deben ser traspolados directamente a seres vivos para sacar conclusiones o hacer comparaciones sobre el efecto de esos proyectiles en los tejidos de seres vivos, especialmente humanos, a quienes está destinado el estudio de la llamada Balística Médico Legal, Terminal o de Efectos.

Con respecto al comportamiento de los proyectiles de este calibre sobre el cuerpo humano, siempre objeto de opiniones diversas, voy a hacer un breve comentario.

He observado en numerosas oportunidades en personas heridas con proyectiles "factory" de este calibre .38 Spl con puntas de plomo redondeadas (LRN), qué habitualmente dichas puntas se encontraban poco deformadas, excepto que impactaran contra una superficie ósea que les ofreciera mayor resistencia, pero aquí también la deformación era poco manifiesta. La mayoría de estas balas estaban "anidadas" en la profundidad de los tejidos. En las radiografías realizadas previo a la autopsia, podía observarse las figuras de las balas con un aspecto general conservado.

En mi opinión es el factor velocidad, considerando las características constructivas particulares de cada bala, entre otros, quien juega un rol muy importante en la deformación de un proyectil. Algunos autores manifiestan que por arriba de los 260 a 280 m/s puede obtenerse, en este calibre, algún grado de deformación de una punta ojival de plomo sin camisa (o desnuda), de 158 grains; y que con una velocidad mayor a 360 m/s se puede producir la deformación de las llamadas balas expansivas.

Existe una popular carga de defensa llamada "carga FBI" que es +P y que consiste en una punta hueca de plomo, semi-wadcutter, de 158 grains (LSWCHP) que, dicen, puede alcanzar una velocidad entre 950 a 1.000 pps (289,6 a 304,8 m/s), pero que parece dar malos resultados si es usada en revólveres con cañones de menos de 3 pulgadas de longitud.

Masad Ayoob recomienda para defensa personal el cartucho Winchester FBI +P, con una bala de plomo wadcutter, punta hueca (hollow point), de 147 grains de peso (LWCHP +P).

Para revólveres con cañones de 2 pulgadas existen cartuchos de nuevos diseño que permiten el uso de cargas que desarrollan presiones acorde a los niveles SAAMI +P, y que utilizan puntas encamisadas, huecas, con un peso entre 110 y 125 grains (JHP).

Otro ejemplo de la variedad de municiones para este popular calibre es la munición +P que la Buffalo Bore Ammunition promociona como pesada: la Heavy .38 Special +P, con una bala de plomo hueca, semiwadcutter de 158 grains (LSWCHP), una velocidad de 1.000 pps (304,8 m/s) y una energía cinética en la boca de fuego del arma de 351 libras/pie (48,5 kilográmetros). Dicen que esta carga maximiza la eficacia de un revólver 38 Spl.

Para revólveres con cañones de 2 pulgadas, llamados amistosamente "nariz chata o ñatos" (snub nose, en inglés), la Buffalo Bore posee un cartucho +P con una bala semi wadcutter de plomo, punta hueca, (LSWCHP +P) que, dicen, expande muy bien a una velocidad más baja de 800 pps (243,8 m/s). También se puede escoger una carga +P con una punta hueca cubierta por una delgada camisa, que llaman "jacketed hollow cavity" (JHC). A todas estas municiones + P de Buffalo Bore se recomienda utilizarlas en armas modernas.

Como podemos ver, existen discrepancias entre los diversos usuarios habituales de este calibre .38 Spl (y de sus fabricantes) con respecto a si se debe privilegiar la velocidad o el peso del proyectil debiendo, además, tener en cuenta el largo de cañón a usar. Se plantea así la antigua disyuntiva entere las balas lentas y pesadas y las rápidas y livianas.

Será entonces, desde mi punto de vista, la experiencia personal y la opinión de terceros pertinentes las que deberán regir cual tipo de munición emplear, según las circunstancias.

Abel Domenech expresa en su excelente "Nuevo manual de recarga 2014", que un proyectil normal calibre .38 Spl con un peso de 158 grains (10,23 g) y una velocidad en la boca de fuego de 755 pps (230 m/s ), produce a ese nivel una energía cinética de 200 libras/pie (27,66 kilográmetros). Estos valores, especialmente el de la energía cinética, tal como expreso en mi libro "La incapacitación inmediata por el trauma balístico", le conferirían a un proyectil con esas características, disparado desde un arma de puño con cañón de longitud estándar, la capacidad para "derribar a un hombre medio", como enuncia Oscar Albino en su libro, o como dicen otros autores, para dejar a un individuo "definitivamente fuera de combate".

Para poder determinar teóricamente el llamado stopping-power o poder de detención de los proyectiles de las armas de fuego portátiles se ha recurrido a diversas fórmulas y procedimientos. Una de estas fórmulas es la que desarrolló el famoso cazador John Pondoro Taylor conocida como "Factor Knock Out de Taylor" (Taylor KO Factor o TKOF, en inglés), quien la utilizara originalmente para mensurar el stopping-power de los proyectiles de armas de fuego aptos para la caza de grandes animales africanos. Existen tablas donde se hallan mencionados cartuchos de diferentes calibres para armas largas y de puño, teniendo cada uno de ellos su correspondiente índice "KO de Taylor".

Aplicando esta fórmula, como hace A. Domenech en el manual antes mencionado (que es usada habitualmente por numerosos especialistas en balística), le corresponde al calibre .38 Spl un índice de 6,1. Para tener una idea de qué representa este valor del KO de Taylor conferido al .38 Spl, lo cotejo con el 6,8 otorgado al 9 mm Parabellum y con el 11,3 del .357 Magnum que es, según Marshall &Sanow, el calibre de arma de puño, dentro de los de uso más frecuente, con mayor poder de detención.

La fórmula de J. Taylor, en mi opinión, es de un valor relativo para determinar el stopping-power de un proyectil ya que tiene sus limitaciones, como casi todas las fórmulas destinadas a ese fin, porque originalmente el TKOF fue creado para aplicarlo a proyectiles sólidos no expansivos disparados por fusiles de caza mayor. Pero, al menos, estos índices sirven para tener una plataforma desde la cual se pueden hacer comparaciones que pueden dar alguna orientación de cierta utilidad práctica en éste, a veces, disputado tema.

En base a lo antes expuesto, el lector puede sacar sus propias conclusiones, siendo indudable que con este calibre el lugar de impacto del proyectil juega un rol notorio y destacado en la obtención de la llamada incapacitación inmediata. En realidad este concepto vale para todos los calibres de armas de fuego en general, y en las de puño en particular.

FIGURA N° 5: Cartuchos .38 Spl con diferentes tipos de puntas.

Pero en la vida real se presentan muchísimas variables que inciden en la obtención de la deseada "incapacitación inmediata con un solo disparo", que no las consideraré aquí. A ello lo explica, fundamentalmente, el variable comportamiento general del organismo de un individuo herido (especialmente del sistema nervioso central), como así también revela las numerosas y disímiles opiniones al respecto formuladas por diversos estudiosos de la Balística de Efectos.

Con el paso del tiempo, los inconvenientes de utilizar armas de construcción estándar que podían tener problemas con esas municiones más poderosas del .38 Spl fueron superados con la aparición, en 1935, de un nuevo calibre: el .357 Smith&Wesson Magnum, cuya vaina tiene una longitud 2 mm mayor que la vaina del .38 S&W Spl, mayor carga de pólvora sin humo y un proyectil de igual calibre que desarrolla mayor velocidad y energía cinética, todo lo cual significa mayor posibilidad de lograr la incapacitación inmediata con un solo disparo.

Hay algo en este artículo que creo necesario exponer, y ello es que al hablar del calibre .38 S&W Spl es prácticamente inevitable referirse al revólver .38 S&W Military&Police, del cual algo dijese más arriba, pero que creo importante enfatizar. Este revólver, también muy famoso, fue una evolución del modelo .38 Hand Ejector Model 1899 primer modelo, conocido igualmente como S&W Model 1899 Army/Navy, que estaba destinado a usar el calibre .38 Long Colt, reglamentario para ese tiempo en el Ejército de USA. A este arma se le realizaron varias modificaciones con el transcurrir de los años. Hacia 1920, para algunos autores, al revólver se le da el nombre de .38 Military&Police D A y a partir del 11 de febrero de 1958, desde el número de serie S 990184, recibe la denominación de Smith & Wesson Model 10 (modelo 10), el cual está actualmente en producción y que fuese adoptado como arma reglamentaria por fuerzas policiales de numerosos países.

Como dato interesante para dimensionar el rotundo éxito que alcanzó el revólver M&P en el calibre .38 Spl, baste decir que para el 22 de marzo de 1948 la compañía S&W alcanza la cantidad de 2 millones de revólveres fabricados, en 1967 llega al tercer millón y en 2008 a 6 millones de unidades. Este calibre se utilizó en armas largas y también en un modelo de pistola automática que fue fabricada en los años 60 por la empresa S&W para disparar el .38 Spl Wadcutter: la Model 52 .38 Master Auto, que fuera usada con gran éxito en competencias deportivas.

Existe un dato curioso sobre este revólver M&P en calibre .38 S&W Special que, en mi opinión, es mencionado en pocas oportunidades. Herman Goering, el conocido jefe de la Fuerza Aérea de la Alemania nazi, usaba un revólver de este famoso modelo y calibre, encontrándose actualmente dicha arma en el Museo de la Academia de West Point.

FIGURA N° 6: Revólver S&W .38 SPL M&P de H. Goering

La casa Colt también fabricó, en esos tiempos, excelentes revólveres para este calibre y lo continuó haciendo por muchos años más. Un ejemplo de ello es el modelo Colt Detective Special, introducido en 1927, del cual se produjeron muchas variantes en años posteriores y que tuviera gran aceptación en el medio policial, agencias de seguridad y en el ámbito civil. El FBI fue, en su época, un importante usuario de este muy confiable revólver. En la actualidad se lo continúa utilizando como arma de defensa personal.

FIGURA N° 7: Revólver Colt Detective Special con cañón de 2 pulgadas, calibre .38 Spl.

A pesar de contar con más de un siglo de vida en sus espaldas, hoy en día el calibre .38 S&W Special sigue siendo una de las municiones más fabricadas y difundidas por todo el planeta, al igual que los revólveres que lo utilizan. Su popularidad obedece a sus excelentes condiciones como munición de defensa y para el tiro de precisión, siendo un cartucho muy fácil de recargar. Además es un cartucho que se puede usar en revólveres relativamente pequeños y fáciles de ocultar entre las ropas, siendo su retroceso muy aceptable y fácil de dominar con la práctica.

FIGURA N° 8: Revólver Smith & Wesson .38 SPL modelo 10 (Fuente:http://www.imfdb.org/wiki/the_untouchables_(1987)

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El revólver de la figura N° 8, que fuera usado por el agente George Stone (Andy García) en la película "Los intocables" (The Untouchables. 1987) en un violento tiroteo que mantiene contra un gánster en una estación de trenes, no se corresponde, en mi opinión, con el verdadero diseño o aspecto externo que esos revólveres poseían en la época en que, según la película, se realizó dicha refriega. Correspondería tener una silueta semejante al revólver de la figura N° 6.

Es verdad que el revólver ha visto disminuido su uso en los últimos decenios, especialmente a partir de los años 70, en favor de las pistolas semiautomáticas de gran calibre y elevada capacidad de munición en sus cargadores, las cuales fueron adoptadas masivamente en el medio militar y policial. Pero el .38 S&W Special es todavía un calibre que si el tirador, policía o civil que lo utiliza para defensa personal, tiene el entrenamiento adecuado, va a rendir todo lo bueno que de este noble y versátil calibre se puede esperar.

Creo pertinente señalar sobre este punto qué, por alguna muy buena razón, este calibre tiene más de 100 años de uso continuado y qué, de seguro, permanecerá en carrera por muchos años más.

Agradecimiento: agradezco la valiosa colaboración del Sr. Lorenzo A. Fanciotto para la realización del presente trabajo.

Biblografía Consultada:

-Albino Oscar.: "Nociones de balística para armas menores". Ediciones del Autor. 2004.
-Cartridges of the World. 4th Edition.
-Domenech Abel: "Manual Argentino de Recarga". 4° Edición. Bs.As. 2014.
-Fernández Gonzalo J.: "Calibre .38 revólver". Revista Armas y Tiro Nº 47, 48, 49, 51-52. Bs. As. 1972.
-Gun Trader?s Guide. 32nd Edition. 2010.
-Hudson Mike.: "The Vintage .38 Long Colt". (http://www.chuckhawks.com/38LC.htm)
-Jinks Roy G.: "History of Smith&Wesson". Beinfeld Publishing Inc. 8th Edition.1983.
-Rossi Giovanni: "Smith &Wesson mod. M. e P. 10": Diana Armi N°1. Gennaio 1979.
-Venturino Mike: "Upgrade the .38". Shooting Times. Vol. 36. N° 10. October 1995.

Internet:

- http://www.american-firearms.com
-http://en.wikipedia.org/wiki/Overpressure_ammunition
-http://www.firearmstactical.com/ammo_data/38special.htm
-http://ammunitionstore.com/content/38%20Special.pdf
-http://www.thehighroad.org/archive/index.php/t-253474.html
-https//www.buffalobore.com

Vanzetti Oscar Enrique

Médico Legista

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